Con la evolución de la vida digital se ha vuelto una actividad cotidiana tomar fotos y compartirlas a través de las redes sociales. Usualmente las personas tienden a sacarse selfies y hacer lo propio con ellas, por ejemplo, aplicar filtros que van desde mejorar la luz en la totalidad de la imagen hasta retoques que mejoran las imperfecciones de la piel, agregan pestañas, delinean las cejas, inflan los labios, resaltas los pómulos y los enrojece, por citarlas más comunes. ¿Esto que tiene de peligroso? La acción tal cual de modificar tu imagen y presentarla como otro “Yo digital” talvez no tiene nada de peligro, pero el problema surge cuando la persona desea parecerse a ese “Yo digital”. En un estudio realizado en el año 2015 concluyó que existe una relación entre las selfies editadas con el descontento del propio cuerpo. De acuerdo con la psicóloga Amanda Perkins, este exceso de filtros en las selfies distorsionan la percepción de la belleza y en algunos casos podría provocar Trastorno Dismórfico Corporal, pues no solo se compara nuestra imagen con la de otras personas, como artistas o influencers, sino que se compara con una versión “mejorada” de nosotros mismos.
La Wikipedia define el Trastorno Dismórfico Corporal (TDC) como un trastorno obsesivo que consiste en una preocupación fuera de lo normal por algún defecto, ya sea real o imaginado, percibido en las características físicas propias.
Otro estudio realizado por las doctoras McLean, Paxton, Werthmein y Masters nombró a este tipo de dismorfia como “Dismorfia Snapchat” donde las personas que manipulaban su imagen tenían un nivel de preocupación mayor por sus cuerpos y lo hacían para validar su atractivo.
El problema empieza a crecer cuando esta ilusión de belleza se vuelve un retoque estético con visitas al cirujano plástico. Es vital que el cirujano identifique que la persona presenta señales de Dismorfia y la dirija al psicólogo en vez de la cirugía. Normalmente estos casos se identifican ya que el paciente llega con una imagen de un influencer o una propia pero modificada, junto con el grado de ansiedad que esto le provoca. Usualmente este trastorno afecta a jóvenes milennials que utilizan mucho de su tiempo en las redes sociales.
Algunos estudios demuestran que cuando estas personas se someten a cirugías correctoras, el porcentaje de insatisfechos supera el 90%.
Durante el 2018 México ocupó el tercer lugar en procedimientos cosméticos, superado por Brasil y Estados Unidos, siendo las mujeres el porcentaje mayor (87.4%) que se somete a dichos procedimientos. En un sondeo realizado por Testigo Púrpura a 50 mujeres, el 74 por ciento de ellas manifestó el uso de filtros a sus selfies para subirlas a sus redes sociales, entre las razones más comunes para esta actividad se encuentran el deseo de verse mejor y de borrar o de disimular las imperfecciones en la piel. El 70 por ciento de las encuestadas ha considerado realizarse una intervención estética.
Referencias:
- Wikipedia. (Sin info). Trastorno dismórfico corporal. Agosto 12, 2021, de Wikipedia Sitio web: https://es.wikipedia.org/wiki/Trastorno_dism%C3%B3rfico_corporal
- TecnoXplora. (Julio 07, 2021). Dismorfia del selfie: qué es y cómo te puede afectar. Agosto 12, 2021, de La Sexta Sitio web: https://www.lasexta.com/tecnologia-tecnoxplora/redes-sociales/dismorfia-selfie-que-como-puede-afectar_2021070760e5583c1bebaa000178e7cd.html
- Amor Saez. (Mayo 28, 2021). ¿En qué consiste el trastorno de la dismorfia por culpa de los selfies?. Agosto 12, 2021, de ELLE Sitio web: https://www.elle.com/es/belleza/cara-cuerpo/a36473694/dismorfia-selfies/
- Mariana Herrera López. (Abril 06, 2021). Esa no soy yo: de selfies y filtros a dismorfia corporal. Agosto 12, 2021, de AmecoPress Sitio web: https://amecopress.net/Esa-no-soy-yo-de-selfies-y-filtros-a-dismorfia-corporal
- https://commons.wikimedia.org/wiki/File:The_Master_Selfie.jpg